La estética no es el foco de la Mercedes Sprinter. Es una camioneta de carga que
cumple con un diseño estrictamente funcional, sin margen para ornamentos.
Esto la hace casi indistinguible de modelos similares de la competencia, más allá de los
rasgos únicos de la trompa y la parrilla.
La Sprinter cuenta con un motor turbodiésel de 2.1 litros que desarrolla hasta 114 cv
de potencia (para el furgón corto) y 163 (para el resto de los furgones) y entrega hasta
330 nm de torque.
La transmisión es manual de 6 marchas y la tracción es trasera.
Por sus dimensiones, la Sprinter no se caracteriza por aceleraciones, que puede
insumir unos 14 segundos para los 0-100 km. La potencia del motor alcanza para
ofrecer buena agilidad urbana aún en situación de carga. La velocidad máxima es de
160 km/h.
Los consumos son muy económicos, esperable para un vehículo diésel: 10,4 litros cada
100 km en ciudad y 9 litros en ruta. El tanque de combustible, de 71 litros, no es el más
grande del rubro.
La Sprinter puede conducirse sin problema tanto en ciudad como en ruta. Su
mecánica, con el sello de calidad de Mercedes, es sólida y confiable.
En ciudad ofrece un adecuado confort de marcha, excelente absorción por parte de las
suspensiones, dirección asistida hidráulica y un motor ágil. Obviamente, por una
cuestión de tamaño, la maniobrabilidad es limitada. Cuanto más largo el furgón, mayor
el radio de giro.
En la ruta es un vehículo bastante estable, que además cuenta con control electrónico
de estabilidad. Por su porte, es más bien sensible a los vientos laterales. Lógicamente,
no es un vehículo idóneo para realizar maniobras temerarias ni para tomar curvas a
altas velocidades.
La Sprinter ofrece varias configuraciones de cabina, con capacidad para dos, tres o
hasta cinco ocupantes. Esta última opción, de uso mixto o familiar, agrega una 2da fila
de asientos y es compatible con los furgones corto y mediano. Los furgones largo y
extralargo, en cambio, solo vienen con espacio para 3 ocupantes es una única fila
delantera.
La postura de manejo elevada es la típica de furgón. La butaca puede reclinarse y
regularse tanto en altura como longitudinalmente. El volante cuenta con comandos
multifunción y permite su regulación en altura e inclinación.
La capacidad de carga varía según la longitud del furgón, la altura del techo y la
configuración del chasis.
El furgón corto ofrece una zona de carga de 2,6 m. de largo (1,83 con cabina mixta) x
1,78 m. de ancho y 1,72 m. de altura.
El furgón mediano amplía la zona de carga a 3,27 m. (2,5 con cabina mixta) x 1,78 x
2,02 m.
Los furgones grande y extra-grande mantienen el mismo ancho y la misma altura, pero
amplían la longitud total de carga a 4,3 y 4,7 metros respectivamente (sin modificar la
distancia entre ejes).
El equipamiento de la Sprinter es superior a la media del segmento utilitario, con
varias funciones relativamente avanzadas que se ofrecen de serie y una generosa
paleta de funciones optativas para sumar a la mayoría de las versiones.
Cuenta de serie con climatizador, espejos calefaccionados eléctricos, control de
crucero y piso de madera en la zona de carga. La cámara de retroceso viene de serie
solo en el furgón extra-grande, pero puede agregarse optativamente a todas las
versiones.
El tablero cuenta con dos cuadrantes de aguja para velocidad y cuentavueltas. En el
centro hacia abajo, en el reloj central, está el display digital para indicar nivel de
combustible y temperatura del motor. No es moderno, pero cumple con su función sin
mayor inconveniente.
En todas las versiones la radio es multimedia, con pantalla táctil de 7 pulgadas,
conexión Bluetooth, compatibilidad con smartphones y conectores USB para
conductor y acompañante.
El equipamiento de seguridad de la Sprinter viene de serie y está entre los más
completos de su rubro.
Esto incluye control de estabilidad electrónico, control de tracción, airbags para
conductor y acompañante y frenos ABS con asistencia en el frenado de emergencia y
distribución electrónica del frenado.
Cuenta también con algunas funciones avanzadas tales como sistema activo de
frenado, asistente de viento lateral, asistente de arranque en pendiente, y asistente de
alerta por cansancio.
La Sprinter ofrece una solución de carga con el extra de tecnología y calidad que
caracteriza a la marca Mercedes.
Sin ser un vehículo de lujo ni mucho menos, se destaca de sus competidoras por un
equipamiento de confort, multimedia y seguridad superior al promedio, además de
una muy amplia gama de versiones y funcionalidades: utilitario puro, uso mixto
familiar chasis y minibus o combi.