Versión base con caja manual. Trae doble regulación de volante, aire acondicionado, multimedia de 7'' y control de estabilidad.
Kicks Exclusive CVT Bitono
Resumen
Equivale a la versión Exclusive, pero se distingue por su carrocería bitono.
Kicks Special Edition CVT
Resumen
Es una edición especial de la versión Exclusive, en carrocería bitono blanco/negro e interior negro/naranja.
Kicks Advance MT 1.6L
Resumen
Versión intermedia con caja manual. Suma volante forrado en cuero, manijas interiores cromadas y asistencia de estacionamiento sonora.
Kicks Advance CVT
Resumen
Versión intermedia con caja automática CVT. En lo demás es igual a la Advance manual.
Kicks Advance Plus CVT
Resumen
Versión intermedia con caja automática CVT. Se distingue por su sistema de audio Bose Premium
Kicks XPlay
Resumen
Serie especial limitada con carrocería bitono y distintivos estéticos.
Kicks Exclusive CVT
Resumen
Versión full con caja automática CVT. Suma climatizador automático, tablero digital, airbags laterales y de cortina y asistencia de estacionamiento.
En un segmento superpoblado que puede volverse algo monótono, la Nissan Kicks
tiene el indudable mérito de diferenciarse visualmente de sus rivales. Es un auto muy
reconocible, más allá de gustar o no.
La originalidad de la Kicks se nutre de ángulos curiosos, protuberancias llamativas y
doblamientos atípicos, que le otorgan un profundo carácter sin ser subversiva ni
aparatosa.
Por ejemplo, tanto las ópticas delanteras como traseras, en vez de estar cómodamente
cavadas en la carrocería, sobresalen con volumen propio casi como orejas, incluyendo
ángulos cortantes y partes orientadas 100% hacia el cielo.
Otro factor distintivo es el recorrido de la cintura exterior hacia atrás, rematando en
una suerte de punta piramidal que no pasa desapercibida. El perfil también llama
gratamente la atención por las líneas oblicuas de las ventanillas que se van abriendo
hacia la parte del parabrisas.
La Kicks tiene un motor naftero de 1.6 litros que en este caso – reconfiguración
mediante – alcanza una potencia de 120 cv y 149 nm de torque. A pesar de las
renovaciones, sigue estando por debajo de la motorización promedio del segmento.
Según la versión, la caja de cambios puede ser manual de 5 velocidades (Sense, Advance), o automática
CVT con variador continuo (Advance, Exclusive).
La tracción es delantera.
La aceleración de 0 a 100 km/h se produce en unos 11,8 segundos, un valor
relativamente modesto. La velocidad máxima que alcanza es de 170 km/h.
La frenada de 100 a 0 km/h se produce en unos 40,8 segundos. Muy buen valor.
Los consumos no deslumbran pero son más que lógicos para un auto de este porte:
10,7 litros cada 100 km en ciudad y, en ruta, 6,7 y 9 litros a 100 y 130 km/h
respectivamente.
Con solo 41 litros de capacidad, el tanque es demasiado chico y afecta la autonomía.
Desviándose de la norma predominante, la configuración dinámica de la Nissan Kicks
apunta a lograr mejores prestaciones relativas en ruta, que en ciudad. Es decir, las
suspensiones no son tan blandas y están calibradas para brindar la máxima
confiabilidad en ruta.
A esto se le suman unos neumáticos de perfil bastante bajo, algo contraintuitivo para
un vehículo supuestamente “aventurero”.
El resultado es un auto de excelente comportamiento y tenida en asfalto, pero que en
ciudad puede transmitir alguna que otra aspereza en el andar cotidiano.
De todas maneras, tiene un despeje relativamente bueno que garantiza inmunidad
ante posibles golpes y roces del carter. Por otra parte, la dirección y el motor brindan
una agilidad de manejo muy buena en el tránsito citadino.
Anda muy bien en caminos de tierra, pero no es un vehículo para uso offroad. No tiene
tracción 4x4 en ninguna de sus versiones. Apenas la caja automática tiene un modo
“Low” que retiene una relación de cambio baja para salir de abajo con mayor torque
en pendientes o con mucha carga.
Fiel a la tradición Nissan, el diseño del panel es moderno pero sobrio, con materiales
mayormente duros, no necesariamente de máxima calidad, pero de aspecto durable y
buenos encastres.
La posición de manejo es algo elevada pero cómoda en general. El volante se regula en
altura y profundidad en todas las versiones.
Los aplausos se los llevan las plazas traseras, que ofrecen confort óptimo para tres
ocupantes, con margen de sobra para las piernas y la cabeza. Los asientos son
rebatibles 60/40.
El baúl es uno de los más grandes de su segmento.
Las funciones accesorias son más o menos parejas para toda la gama.
Desde la versión Sense incluye llave inteligente para abrir y encender el motor, cierre
centralizado a distancia, aire acondicionado y levantavidrios eléctricos. Esto es lo más
relevante que viene de serie.
Las versiones con cambio automático incorporan control de velocidad crucero.
La versión Exclusive suma climatizador automático y asistencia de estacionamiento con
4 cámaras de visión 360°.
El tablero es mixto, con un único cuadrante analógico para el velocímetro y una gran
pantalla digital que simula un 2do cuadrante de aguja para el cuentavueltas. Esta
característica le otorga una importante flexibilidad, ya que el indicador de
cuentavueltas puede reemplazarse por muchos otros modos, brindando una gran
cantidad de información. Esta característica es – valga la redundancia – exclusiva de la
versión Exclusive. En las otras versiones hay un tablero más convencional.
El sistema multimedia sí es homogéneo para toda la gama: incluye pantalla táctil de 7’’
con Apple Car Play y Android Auto, además de conectividad Bluetooth, USB, Aux-in y
iPod Ready.
La Kicks fue uno de los primeros modelos de Nissan en incorporar control de
estabilidad y tracción. A partir de su restyling en 2021 y siguiendo las tendencias del
mercado, incorporó también 6 airbags de serie en todas las versiones: delanteros,
laterales y de cortina.
Solamente la versión Exclusive ofrece ayudas electrónicas a la conducción, tales como
alerta de tráfico cruzado, alerta de punto ciego, alerta de colisión frontal y frenado
inteligente de emergencia.
Algunas funciones bastante específicas que tiene como plus son control inteligente de
manejo, control inteligente de trazo y freno inteligente del motor, esta última solo
para las versiones con caja automática CVT.
Dentro de un segmento donde arrecia la competencia, la Nissan Kicks ha gustado
bastante. Es una presencia frecuente en las calles y en términos de ventas cerró 2020
con buenos números. Todavía le falta un empujón extra para tomar por asalto los
primeros lugares pero ya se encuentra entre las SUVs más populares junto con la
Renegade, la Tracker, la T-Cross, la C4 Cactus y la la 2008.
Las razones de estos buenos resultados pueden encontrarse en su diseño original, su
precio relativamente competitivo, su destacado confort interior, sus buenas
sensaciones en ruta y la confiabilidad mecánica que suele caracterizar a los productos
Nissan. Su último rediseño incorporó también algunas funciones de seguridad
esenciales, como 6 airbags en todas las versiones.
Tiene algunos problemas: el motor es algo módico para su segmento, el tanque de
combustible es demasiado chico, el confort de marcha en la ciudad – sin ser malo – no
compite con sus rivales.
El balance, no obstante, da positivo para quien necesite un vehículo práctico, cómodo,
atractivo y – sobre todo – más o menos accesible en un mercado que se ha vuelto caro
y donde el dinero siempre está medio justo.